El golpe de calor en perros.
Con la llegada de las altas temperaturas es esencial que estemos alerta y prevengamos los efectos del calor en nuestro estimado peludo.
Es importante concienciarnos sobre este tema ya que, con una mínima prevención, podemos ahorrarnos más de un susto provocado por un golpe de calor… ¡sobre todo si eres petparent primerizo!
Las 7 señales que indican que tu perro sufre un golpe de calor.
Un golpe de calor en perros puede conllevar que su temperatura corporal alcance más de 42ºC.
Teniendo en cuenta que el nivel medio óptimo en perros es de 38 a 39ºC, esta subida puede producir una alteración de sales y azúcares en su cuerpo. Es de vital importancia reconocer los síntomas básicos de un golpe de calor en nuestro perro.
- Ahogo: Respiración excesiva o ahogo, dificultad para respirar y suspiros fuertes.
- Salivación excesiva.
- El perro puede mostrar debilidad, desorientación o tener dificultades para moverse.
- Taquicardia.
- Encías y lengua de color rojo o azul: Quizás notes que las encías y la lengua del perro tienen un color anormal, indicando problemas de circulación.
- Vómitos y diarrea: Pueden aparecer como consecuencia del malestar.
- Temblores o convulsiones: En casos graves, el perro podría experimentar temblores o convulsiones.
Si observas alguna de estas señales después de exponer tu perro en temperaturas elevadas, es fundamental actuar de manera rápida y eficiente. Mientras contactamos o accedemos a una clínica veterinaria, podemos aplicarle unos primeros auxilios:
Primeros auxilios: cómo actuar
- Lleva a tu perro a un lugar fresco y sombreado.
- Proporciónale agua fresca pero no helada para beber (poco a poco)
- Refréscalo con toallita húmedas la zona de la tripa y axilas o con una ducha ligera.
- Contacta tu veterinario para una atención médica urgente.
Lugares donde puede ocurrir un golpe de calor.
Aquí tienes una lista de los principales lugares y situaciones donde tu perro puede sufrir un golpe de calor. Es esencial evitarlas o tomar precauciones para proteger la salud de tu amigo peludo:
- Dentro de un coche estacionado: Nunca dejes tu perro dentro de un vehículo estacionado, incluso si es solo por unos minutos. Las temperaturas pueden aumentar drásticamente y poner en peligro su vida.
- Al exterior con temperaturas elevadas: Exponer tu perro en temperaturas muy altas sin una zona de sombra o agua puede conducir a un golpe de calor.
- Después de ejercicio intenso: Evita hacer ejercicio vigoroso con tu perro durante las horas más calurosas del día, puesto que pueden sobrecalentarse.
- El interior de un hogar sin ventilación: Si tu perro permanece en una habitación sin corriente de aire o ventilación adecuada en días calurosos, puede sufrir las consecuencias del ambiente cerrado.
- En paseos largos o caminatas por terrenos excesivamente calurosos: Si haces una caminata larga con tu perro en un terreno cálido, es importante proporcionar pausas a la sombra y ofrecer agua frecuentemente.
- En zonas asfaltadas o pavimentadas: Los pavimentos calientes, pueden calentarse mucho en días de calor y quemar las patas del perro.
- En momentos de estrés o ansiedad: Los perros ansiosos o estresados pueden sufrir un golpe de calor más fácilmente.
- Razas con predisposición al calor y/o braquícefalos: Algunas razas de perros, como los bulldogs, los carlistas y los shihtzus, tienen una predisposición genética para tener problemas de regulación de la temperatura, cosa que los hace más susceptibles al golpe de calor.
Es fundamental estar alerta en estas situaciones y tomar medidas preventivas para asegurar que tu perro esté siempre protegido de las temperaturas extremas.
Kit de supervivencia para actuar rápido
Para evitar un golpe de calor en tu perro durante las salidas al exterior, es importante llevar una mochila con algunos elementos esenciales para protegerlo del calor. Apunta:
- Agua fresca: Lleva una botellita de agua fresca y una jarra o bebedor portátil para que tu perro pueda hidratarse regularmente durante las caminatas.
- Toallitas húmedas: Las toallitas húmedas son útiles para refrescar a tu perro y limpiarlo en caso de que se ensucie.
- Manta o toalla fresca: Lleva una manta o toalla humedecida con agua fresca porque tu perro se pueda estirar y refrescar en una zona de sombra.
- Gorra o sombrero: En algunas ocasiones, una gorra o sombrero para perros puede ayudar a proteger su cabeza ojos del sol directo.
- Protección solar: Si tu perro tiene pelaje claro o corto, considera utilizar un protector solar específico para perros para evitar quemaduras solares.
- Correa y arnés fresco: Opta por una correa y un arnés transpirables que no acumulen calor y sean cómodos para tu perro.
- Descanso a la sombra: Planifica rutas con áreas de sombra donde tu perro pueda descansar y refrescarse durante las paseadas.
- Pausa en las horas más cálidas: Evita los paseos largos durante las horas más calurosas del día y busca sombra para descansar.
- Conoce las señales de alerta: Familiarízate con las señales de un golpe de calor para poder actuar rápidamente en caso de que tu perro muestre algún síntoma preocupante.